Fotografia: Edgar Arturo Govea.

El pasado 30 de abril de este presente año, se llevó a cabo la primera edición del festival E•choes, en la Hacienda Benazuza en el estado de Jalisco. Un festival que prometía mucho y que no dejó a deber a ninguno de los asistentes. La buena vibra y la energía de todas las personas que estaban ahí se podía sentir desde la entrada y en el escenario. Tenemos que reconocer que la organización estuvo increíble.

Fue un evento en donde pudimos disfrutar de buena música, buena comida, un ambiente muy original, muy ameno y sin duda podemos decir que esté ha sido un festival en el cual el ambiente lo han puesto los asistentes. Nos mencionaron durante el festival que fue un lleno total y que las entradas estaban agotadas. 

Este festival se promocionó como un paraíso musical y podemos decir que lo pudimos disfrutar y vivirlo. Nos encantó poder ser parte de este evento qué celebra la música, la vida, un buen ambiente y principalmente artistas independientes de distintos lados del mundo. Fue un festival bastante internacional, en donde nos tocó ver bandas de Estados Unidos y de Europa. 

Por mencionar algunas bandas, nos tocó ver a Post Animal quiénes pusieron a bailar a todos con su energía en el escenario y se pudieron conectar con la audiencia a pesar del sol y el calor que pegaba a esa hora. Poco a poco el día fue avanzando y una de las bandas bastante esperadas fueron los de Feng Suave a quiénes pudimos ver recientemente también en la Ciudad de México. Una banda ya bastante conocida aquí en México y muy querida son los de KAKKMADDAFAKKA, quienes desde Noruega vinieron nuevamente a nuestro país a poner la fiesta y la energía que los caracteriza. Desde Francia pudimos escuchar a grandes proyectos independientes que van en ascenso, como el de Darius y L´IMPERATRICE quiénes fueron los encargados de cerrar la noche y ponerle cierre a este gran evento que sabemos sin duda será el primero de muchos.

No tenemos mucho que decir acerca de la organización, más que todo muy bien, muy buena distribución, muy buena energía y señalamientos. El único detalle que nos comentaban algunos de los asistentes, fueron los accesos, ya que no contaban con estacionamiento suficiente para todos y mencionaban que una buena idea hubiera sido tener transporte de ida y vuelta al lugar. Pero sin duda volveríamos a este festival que esperemos se repita una y otra vez. Nos vemos en la próxima edición. 

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